"Alimentos con luz"
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"Los verdes son ricos en clorofila, que renueva la sangre"
"Deliciosas recetas vivas gourmet"
"Sabores para cada momento"
Postres saludables sin harinas ni azúcar.

Montevideo limpia

Lo que vivimos es un reflejo de nosotros mismos.
Una huelga en los servicios de recolección de basura ha creado un caos en las calles, dejando en evidencia la cantidad astronómica de basura que genera el estilo de vida actual.
Desde el consumo de productos procesados, cuyos envoltorios se convierten instantáneamente en basura, hasta el simple hecho de comprar en un comercio y todos los días utilizar bolsas plásticas.
¿Cómo reducir este impacto ambiental en el futuro?
Parte de la respuesta está en la forma en que elegimos alimentarnos, ya que esto decide que es lo que vamos a consumir.
Consumiendo alimentos vivos, sólo vamos a comprar vegetales (orgánicos) para lo cual tenemos dos opciones, cualquiera de ellas va a evitar el uso de bolsas plásticas y la generación de residuos:
1. Hacer un pedido telefónico para que el productor nos traiga los vegetales a nuestra casa.
2. Ir nosotros a nuestra tienda de vegetales preferida con nuestra bolsa de compras reutilizable.

Lo interesante de esto es que al elegir la alimentación viva, además de los beneficios a nivel de nuestra salud física gracias a la desintoxicación del cuerpo, también estamos contribuyendo a la salud del ambiente al desintoxicarlo de desechos.
Las mismas sobras en las preparaciones de los alimentos al ser de materials orgánicos, podemos ponerlos en un recipiente para hacer compost y no solo generar cero residuos, sino crear así materia prima para una nueva vida de otros vegetales.
Recordemos que todos los productos que no sean orgánicos promueven el uso de herbicidas y otras sustancias tóxicas, estas son también parte de la contaminación de los suelos, el agua y el aire.

Lo que vivimos es un reflejo de nosotros mismos

Es una simple reflexión para tener en cuenta.
El «use y tire» ya vemos que no funciona a nivel ambiental, como tampoco en muchos otros aspectos humanos.
El hecho de «sacar» la basura o yo diría «alejarla de nosotros» no es más que un reflejo del estilo de vida de muchas personas hoy en día. Por ejemplo a nivel de la salud, donde «compramos» nuestra «salud» en una farmacia, cuando en verdad estamos evitando síntomas, que son la consecuencia y no la causa de la enfermedad, estamos «sacando» o «alejando» de nosotros el problema real, la enfermedad, para no tener que enfrentarnos a ella. La enfermedad es la alarma que tiene nuestro cuerpo para indicarnos que algo no está bien en nuestra vida. El dolor de cabeza, como dicen muchos irónicamente, no es causa de falta de aspirina, sino que es provocado por factores, como el stress, toxinas en el cuerpo, por citar algunos. Muchos no quieren enfrentarse al problema real porque esto requeriría un cambio en su vida que no quieren enfrentar.
La solución contra el stress no es una pastilla contra el stress, sino aprender a evitarlo, ¿quién quiere depender toda su vida de una pastilla?
Nuestro cuerpo tiene al igual que la ciudad, un sistema para deshacerse de la basura.
Y como decía antes, lo que vivimos no es más que lo que somos, y lo que vivimos como sociedad no es más que lo que somos como colectivo.
A nivel de la ciudad vemos contenedores de basura saturados de desechos (no se necesita más de un día para esto)
A nivel individual vemos una epidemia de obesidad y otros problemas por saturación de toxinas, como hiperactividad en niños y dificultades de aprendizaje entre otros.
Se llenan de basura las calles y se genera un medio propicio para la proliferación de ratas, moscas, etc.
Nos llenamos de toxinas y generamos un medio propicio para la proliferación virus, bacterias.
Con tanta cantidad de basura se tapan las bocacalles no se puede eliminar el agua de las calles.
Con tantas toxinas en nuestro cuerpo se saturan los mecanismo de eliminación, lo que genera infinidad de problemas de salud: depresión, obesidad, migraña, acné, diabetes, etc.
Nos excedemos en tirar basura, se saturan los recolectores y el procesamiento de basura.
Nos excedemos en consumir toxicos, como el azúcar o el alcohol, se satura el hígado, provocando graves problemas al hepáticos.
Nada más para poner algunos ejemplos, de que en verdad lo que sucede afuera es un reflejo de lo que sucede dentro de nosotros.

Si cambiamos nuestra forma de vivir a nivel personal, y optamos por vivir sin producir basura, y sin intoxicarnos, el mundo va a reflejar nuestra opción.

Es simplemente una opción, está en nuestras manos.

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