El gobierno australiano ha suspendido todas las vacunas de gripe para niños menores de cinco mientras se investiga un aumento de los ingresos al hospital Princess Margaret en Perth.

El ministro de salud, Kim Hames, dice que 45 niños han sido llevados al hospital padeciendo altas temperaturas y convunsiones febriles luego de recibir la vacunación.

El Dr Hames dice que el programa será suspendido hasta que el departamento termine la investigación.

Agrega que los padres que hayan vacunado a sus hijos debería tomar precauciones.

«Si fue hace más de 12 horas, no hay risego.» dijo

«Pero si están dentro de las 12 horas deberían darle a su hijo paracetamol y luego hacer cualquier esfuerzo para asegurarse que la temperatura de su hijo se estabilize.»

Fuente : ABC News

–